Hoy aprendemos que tipo de piel
tenemos y como cuidarla.
La llegada del invierno
nos obliga a realizar algunos cambios en nuestra vida diaria para poder
combatir el frio, el aire. La parte del cuerpo humano que primero y más
sufre ese rigor invernal es la piel, por
lo que es necesario extremar los cuidados para que su adaptación a la nueva
temperatura, no nos genere problemas.
La piel es la parte más externa de nuestro organismo y, por
lo tanto, es la que recibe todas las agresiones exteriores. Es la barrera con
que se enfrenta el mundo exterior, por eso a la vez que es sensible es fuerte,
porque está preparada para ello.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhwFeFo76odKqpZlFxjvCbiwYENJ3WVicNZjXvMSypBrgEDMvLin4yJS6bIiQnR1LXPbktbyoUrr8-mBLCOi8bpqq__UutQKfRQq05UfNHTGD1i00O0ZjGzFP4noq_4xr3qC-qO_YZotuxO/s200/piel-blanca.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj_AHdPITVvffhOsbX87GDQ9uNbWhPx31_LNiorjFaj4Cg3THDbiZbWgJr7vcNYG7adRFZCP5ErGg8hUB3beDj6aduIProX3hhzXFrQC0z7JiBB5YWFIGTg_ixCJcxqW6tXwK03LsvH7Exb/s200/Lanutrigemnicaylapie_18580_9581.jpg)
Supone que, a diferencia del verano, tenemos que tener menos
cuidados con el sol y más con el frio y el aire. Por eso, lo que hay que hacer
es hidratarla con más intensidad, protegiéndola de los cambios de temperatura y
de la desecación que puede producir el aire frío.
A la piel hay que cuidarla por dentro y por fuera. Por lo
tanto, vida sana, limpieza e hidratación son los tres factores que hay que
cuidar para tener la piel sana.
Hay dos tipos de envejecimiento de la piel: el cronológico,
en que intervienen factores internos y genéticos, y el que se produce por los
agentes externos, que es el único en que podemos influir. De estos agentes
externos, el más importante es el sol, que, evidentemente, tomado en exceso
envejece la piel.
Seguime en Facebook
. Contacto: tiff.imagenymoda@gmail.com